Cómo activar los controles parentales en el iPad

Una de las ventajas que tienes a tu disposición cuando te compras un iPad para uso personal o para uso profesional, es que tienes en tu mano las mejores herramientas integradas para tener total control de lo que sucede con tu dispositivo de Apple. Esto es gracias a las Restricciones, o por lo que que todo el mundo conoce como “controles parentales”. Algo muy práctico para limitar el uso del iPad a la familia, a los niños, o los trabajadores de una empresa.

Para acceder al menú que las gestiona tienes que ir a Ajustes - General - Restricciones.

En este apartado del sistema de ajustes del iPad, compartido también con el iPhone, encontrarás una serie de funciones básicas del dispositivo que podrás activar o desactivar según las limitaciones que quieras establecer para un usuario o uso concreto. Por ello tendremos distintas opciones:

Podremos desactivar el acceso a aplicaciones como Safari, Mail, Facetime, Mensajes,... También podremos hacer que desaparezcan del iPad aplicaciones sensibles a compras online, como son iTunes y la App Store. De ese modo, tendremos la certeza de que en nuestro iPad no se compra nada que no queramos nosotros. Lo mismo sucede con la posibilidad de no permitir instalar nuevas aplicaciones, o eliminar las ya instaladas. Pensad en la de usos prácticos que podemos darle solo aplicándolo al uso que nuestros hijos hacen del iPad.

Pero además, dispondrás de la posibilidad de limitar el tipo de contenido que se disfrutará en el iPad por edad o por otros requerimientos. Incluso, podrás evitar que se modifique la configuración de aplicaciones o de ajustes del sistema. Todo ello bajo la contraseña que incluyas y que debes recordar.

Advertencia

Si olvidas la contraseña para desactivar las restricciones, deberás borrar tu dispositivo y configurarlo como nuevo, de manera que perderás tus datos. Si restauras una copia, esto no te asegura el reseteo de esta contraseña, así que no olvides nunca.